La mayoría de los clientes email soportan dos protocolos principales para el manejo de los correos electrónicos: POP (Post Office Protocol) e IMAP (Internet Message Access Protocol). Mientras que los usuarios pueden optar libremente entre el uso de ambos protocolos POP ó IMAP para sus clientes email, ITS (abreviación de Intelligent Transportation Systems) recomienda el uso de IMAP y solo provee documentación de configuración para este protocolo. Las diferencias entre ambos protocolos se detallan abajo.
El protocolo POP se diseñó para personas que acceden a su correo electrónico fundamentalmente en una máquina. Al momento de conectar a un servidor email, el protocolo POP típicamente va a bajar todos los mensajes recibidos a la máquina local, y salvo que se configure en contrario, elimina la copia del mensaje bajado en el servidor de email. El protocolo POP es muy útil para aquellos sistemas donde el espacio dedicado al correo es limitado ya que al bajar en cada conexión todo el correo del servidor y eliminar al mismo deja espacio para recibir nuevos mensajes. Recomendamos este protocolo para su cuenta en HostingKings.
IMAP se diseñó para dejar copias de los mensajes recibidos en el servidor de email, permitiendo a los usuarios chequear sus mensajes desde multiples localidades. Al momento de observar su correo con este protocolo, inicialmente solo se baja a la máquina local el encabezado de los mensajes entrantes; el contenido de cada mensaje es bajado cuando el usuario abre un mensaje en particular.
Teniendo en cuenta que un cliente IMAP en primer instancia no baja el mensaje entero, este protocolo es apropiado para usuarios que tienen una conexión persistente con la Internet. Además, al permanecer los mensajes en el servidor de correo, hay una gran chance de que aquellos mensajes que se eliminen sin querer puedan ser recuperados desde copias de seguridad del sistema (en contrario a los clientes POP, que no ofrecen grandes posibilidades de generar copias de seguridad, ya que el tiempo entre la recepción del mensaje y su remoción es muy pequeña).
Ambos protocolos permiten a los usuarios organizar sus mensajes en carpetas. Las carpetas del cliente POP se guardan localmente en la máquina del usuario y solo están limitadas por la cantidad de espacio disponible en la máquina local. Las carpetas del cliente IMAP--aún cuando están limitadas por las cuotas de espacio en el servidor--ofrecen mayor portabilidad, estando disponibles para cualquier cliente que pueda acceder al sistema.
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